DIARIO DE LEON
Cerezales pide la ejecución del proyecto de reparación integral de 30 millones.
J. C. F. | Ponferrada 15/04/2014
La vía rápida entre Fresnedo y Fabero vuelve a ser un peligro para los vehículos que transitan por esta carretera. Así lo denunció ayer públicamente el alcalde de Fabero, el popular José Ramón Cerezales después de comprobar como nuevos corrimientos de tierra amenazan el trazado de 15,5 kilómetros en varios puntos. «Hay zonas en las que el firme está en el aire, pues por las lluvias del invierno se han producido corrimientos de tierra que dejan prácticamente en el aire el firme», apunta el regidor faberense.
Pese a que el alcance de los daños ha sido relativizado por la Junta de Castilla y León, negando la peligrosidad que denuncia el regidor, la administración autonómica ya prepara una actuación de emergencia a la vuelta de las vacaciones de Semana Santa.
Sin embargo, el regidor de Fabero considera que el tiempo «de estos parches» debe quedar atrás, reclamando la ejecución del proyecto integral de remodelación de esta LE-715. «No son de recibo ni entendibles estos parches continuos en esta vía, cuando están rematados desde 2010 los trámites administrativos para la ejecución del acondicionamiento del trazado de este vial. Un proyecto con un valor estimado de contratación que supera los 32 millones de euros y el presupuesto base de licitación definitivo está en torno a los 38 millones de euros», precisa José Ramón Cerezales.
Por eso, ante el anuncio de la realización de estas nuevas actuaciones de emergencia por parte de la Junta, que consistirían, básicamente, en la construcción de muros para el asentamiento de los taludes, el regidor considera que «la Junta debe dar prioridad al proyecto de vía rápida, al que lo único que falta es la adjudicación, máxime cuando el gobierno central dejó claro que la licitación y adjudicación debían realizarse por la Comunidad, y que la misma debería haberse adjudicado en 2011».
El proyecto por el que ha levantado la voz el alcalde de Fabero contemplaba la ejecución a lo largo de los 15,5 kilómetros de su trazado, de dos carriles en sentido ascendente y uno en sentido descendente, la construcción de un puente sobre el arroyo de Valdeguiza, y la realización de tres glorietas.
Por último, Cerezales reclama que las administraciones implicadas se pongan de acuerdo ya que la situación actual está perjudicando gravemente al municipio de Fabero. «Un municipio que vive, prácticamente de la minería, y para el que cualquier alternativa de industrialización pasa por contar con unas comunicaciones decentes y no tercermundistas».
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